Cría fama y échate a dormir.
Cría cuervos y te sacarán los ojos.
Cuando el río suena, piedras trae.
Cuanto más se tiene, más se quiere.
De donde no hay, no se puede sacar.
De lo que no veas, ni la mitad te creas.
De noche todos los gatos son pardos.
De tal palo, tal astilla.
Del árbol caído, todos hacen leña.
Del dicho al hecho hay un buen trecho.
Del jefe y del mulo cuanto más lejos más seguro.
Después de la tempestad, viene la calma.
Dime con quién andas y te diré quién eres.
Dime de que presumes y te diré de que careces.
Dios aprieta pero no ahoga.
Donde fueres, haz lo que vieres.
El gato escaldado, del agua fría huye.
El hábito no hace al monje.
El mejor escribano echa un borrón.
El ojo del amo engorda el caballo.
El pez grande se come al chico.
El que a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija.
El que algo quiere, algo le cuesta.
El que calla, otorga.
El que espera, desespera.
El que fue a Sevilla perdió su silla.
El que guarda, siempre tiene.
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